La Navidad es un momento de celebración y de reencuentros con los seres queridos… También es una época en la que aumenta mucho el consumo y la alimentación no es una excepción.
Se calcula que la compra de alimentos se incrementa un 20% en estas fechas. Y también tiramos más comida, alrededor de un 20-25% más que el resto del año. Es decir, además de hacer la misma compra que el resto de meses del año, también compramos “lo necesario para celebrar las fiestas", olvidando que siempre nos sobra demasiada comida.
El desperdicio alimentario tiene graves consecuencias ambientales. Es responsable de casi el 10% de las emisiones que provocan el cambio climático y supone malgastar el 28% de las tierras productivas disponibles y el 20% del agua dulce. También tiene un impacto social que genera un enorme sufrimiento, ya que millones de personas siguen padeciendo hambre y desnutrición crónica, habiendo comida de sobra para alimentar a toda la población mundial.
Reducir el desperdicio estas navidades
Si seguimos unos sencillos consejos, podemos evitar el despilfarro de comida en estas fechas:
- El primero es preparar el menú navideño teniendo en cuenta el número de comensales y las cantidades necesarias para cada receta. De esta manera, a la hora de ir al supermercado, se compran las cantidades justas para que no sobre comida. Nada de hacer la compra a ojo.
- Otro punto importante al calcular cuántos alimentos necesitamos es no pasarnos con las porciones. ¿Cuántas veces nos ha pasado eso de poner un montón de entrantes y que la gente esté llena cuando ha llegado el primer plato? No hace falta servir de más.
- Conservar los alimentos adecuadamente también puede hacer que los alimentos nos duren más y no se echen a perder. Infórmate de en qué lugar de la nevera va cada tipo de alimento para alargar su vida útil y consumirlo antes de que no sea apto para su consumo.
- Si ha sobrado mucha comida después de la cena, una opción es invitar a amigos y familiares al día siguiente para que nos ayuden a acabar con las sobras. Lo que sobre, podemos guardarlo o congelarlo para consumirlo más adelante.