La semana pasada estuvimos en Lima en un taller para la formulación del convenio “Por el derecho de las mujeres, adolescentes y niñas a una vida libre de violencias”, que se desarrollará en los próximos cuatro años en las regiones de Lima y de Cusco, en Perú, y que cuenta con la financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo -AECID-. En el taller han participado las compañeras de Entrepueblos y de AIETI, con quienes vamos en agrupación, y de las organizaciones socias peruanas: DEMUS y KALLPA. El convenio tiene como objetivo promover el cambio de los patrones socioculturales que reproducen relaciones desiguales y diferencias y que legitiman y exacerban las violencias contra las mujeres, que se inserta dentro del marco del Plan Nacional contra la Violencia de Género 2016-2021.
En estos días hemos reflexionado, debatido y profundizado en las causas de este grave problema y hemos intercambiado ideas sobre lo que aspiramos a realizar para prevenir la violencia de género, lo que nos va a permitir encaminar con más claridad nuestra propuesta colectiva. Consideramos que un componente importante de la prevención es promover el cuestionamiento de las desigualdades y las normas sociales profundamente arraigadas que perpetúan el control y el poder que los hombres ejercen sobre las mujeres y refuerzan la tolerancia hacia la violencia contra mujeres y niñas. Tenemos un gran reto por delante para trabajar juntas desde diversas miradas y tratar de priorizar nuestras acciones para conseguir avanzar en la igualdad entre hombres y mujeres, y acabar con las violencias de género. Este ha sido solo el primer paso para intentar conseguirlo.
