
Finalizamos el proyecto para fortalecer las redes comunitarias para erradicar las uniones prematuras en el distrito de Magude, Mozambique, subvencionado por la Agencia Andaluza de Cooperación al Desarrollo (AACID), que comenzamos en 2023 con nuestra socia local AMDEC.
El proyecto ha tenido 3 ámbitos de actuación, fundamentalmente:
- Escuelas: trabajando con toda la comunidad educativa docentes, alumnado y familias sensibilizando sobre los riesgos de las uniones forzadas, la ley que las prohíbe y promoviendo cambios en los patrones culturales que las amparan.
- Comunidades: trabajando con las familias, ancianos (identificados por los jóvenes como guardianes de las tradiciones), líderes, radios comunitarias, personal de salud (para identificar los casos de riesgo) para constituir Comités Comunitarios que articulen redes de vigilancia, protección y apoyo a las menores en riesgo o víctimas de uniones prematuras.
- Jóvenes víctimas de uniones forzosas, que se vieron obligadas a abandonar la escuela. Con ellas hemos impulsado cursos de gestión de emprendimiento y ayuda para la puesta en marcha de pequeños negocios para la venta de productos básicos que les ha permitido generar ingresos.
Mozambique se encuentra entre los 10 países del mundo con un mayor índice de uniones forzadas, siendo en menores de 18 años del 48% y de éstas, el 18% contrajo matrimonio antes de los 15 años vulnerando los derechos de niñas y adolescentes a una vida libre de violencias, al derecho a la salud sexual y reproductiva y al derecho a la educación y acentuando la brecha de desigualdad y exclusión para las mujeres.
Estos son algunos de los resultados que hemos logrado y que recoge el informe de evaluación externa, que en breve publicaremos:
El proyecto ha supuesto un fuerte impacto positivo en las 10 comunidades de actuación que han conseguido articular redes de vigilancia, protección y apoyo a las menores en riesgo o victimas de uniones forzadas en las que participan las escuelas, las comunidades, los servicios distritales de salud y la policía. Más de 12.000 personas entre docentes, alumnado, líderes comunitarios e instituciones han estado implicadas en las diferentes fases del proyecto y siguen comprometidas a través de las redes de vigilancia.
“Desde el inicio del proyecto han sido juzgados 6 casos relacionados con violencia de género y uniones prematuras en Magude, esto es un punto positivo del proyecto. Se ha creado una red de vigilancia y denuncia de uniones prematuras, quebrando una cultura de silencio en relación a esta problemática en las comunidades” ( Sr. Vitória Lourenço PRM)
El trabajo en las 10 escuelas ha sido positivo, la implicación de docentes y alumnado y la dinamización de los activistas que han realizado las sesiones de sensibilización ha dado buenos frutos. Los alumnos han conformado clubes escolares que tienen como objetivo identificar casos de riesgo en la escuela y comunicarlos a la dirección para hacer el debido acompañamiento; además de sensibilizar a sus compañeros/as sobre los riesgos que implican las uniones prematuras, el embarazo precoz y el abandono escolar.
“El proyecto nos ha enseñado cómo denunciar y posicionarnos frente a las uniones prematuras y la violencia de género. Y ha ayudado a las jóvenes que fueron víctimas con formación y materiales para comenzar su negocio.” (Helena Mbiza)
“En los clubes escolares aprendimos a como identificar casos de uniones prematuras y de violencia de género en nuestros compañeros/as” (Ernesto Maluleke de 11 años de idade, da EPC Magude)
Además, 150 niñas en riesgo de abandono escolar y unión prematura han participado en los grupos de refuerzo y han permanecido en la escuela; 60 jóvenes víctimas de uniones forzosas han recibido capacitación para la gestión de pequeños negocios y 30 han conseguido iniciarlos mejorando su autonomía económica.
“Durante la formación que tuvimos sobre gestión de pequeños negocios, aprendí a hacer análisis de fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas, para calcular mis ganancias y así poder ver si mi negocio va bien o no.” Salmina Mudlovo
“Este proyecto tuvo un papel importante para las comunidades y la escuela. Desde que comenzó no hemos registrado casos de abandono escolar por motivos de embrazo precoz o unión prematura” (Pedro Jorge Directo da EPC de Cuamula).
De hecho, los casos de abandono escolar han pasado del 5.5% al 3.3% durante los dos años de ejecución del proyecto, conforme a los datos presentados por los Consejos Escolares.
Al mismo tiempo, la metodología de creación de los comités comunitarios y clubes escolares ha generado cambios significativos en sus comunidades y en sus vidas, mejorando su conocimiento sobre la ley, los mecanismos de denuncia y el acceso a nuevas herramientas para identificar y mitigar casos de uniones prematuras.
Han sido dos años de intenso trabajo con las escuelas, con niños y niñas, adolescentes y jóvenes, familias, líderes y estructuras comunitarias, así como con el gobierno local, con el objetivo de luchar juntos contra esta práctica nociva que atenta contra los derechos de niñas y adolescentes y trunca su futuro, su autonomía y su libertad.
Pero, esto no acaba aquí. A partir de estos resultados y de las recomendaciones realizadas por la evaluación externa seguiremos trabajando en el distrito de Magude, extendiendo el proyecto a otras comunidades.