Se estima que en los últimos años se han perdido tres cuartas partes de la diversidad genética agrícola. Es decir, se ha perdido en torno al 90% de las variedades que se cultivaban a principios del siglo XX. Se calcula que a lo largo de la historia se han utilizado unas 10.000 especies para la alimentación humana, sin embargo, en la actualidad apenas 12 especies vegetales y 5 animales proporcionan más del 70%de los alimentos que se consumen. Esta pérdida de diversidad tiene un impacto directo en la seguridad alimentaria.